El objetivo del Modelo Integral de la prestación de servicios de salud es garantizar que los usuarios asignados permanezcan saludables a través de un proceso permanente y sistemático de caracterización y seguimiento del riesgo, disminuyendo los estados de morbimortalidad, garantizando la calidad y humanización de la atención en salud y la satisfacción del usuario, logrando el uso eficiente de los recursos.